Monseñor Francisco Pistilli asumió como obispo de Encarnación. La toma de posesión se realizó ante una multitudinaria presencia de los feligreses, en la Parroquia San Roque González de Santacruz.
La ceremonia fue presidida por el presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya, monseñor Claudio Giménez.
Monseñor Pistilli sucede a monseñor Ignacio Gogorza, quien pasa a ser emérito.
Pistilli cuyo lema es “Alégrense” prometió una atención especial a los jóvenes.
El Nuncio Apostólico mencionó que el nuevo obispo recién estaría asentándose oficialmente en marzo en su sede episcopal debido a que debe completar algunas tareas pastorales pendientes de la Argentina.
Una vez culminado el acto, los Obispos fueron a almorzar y por la tarde hicieron un recorrido por la ribera del Rio Paraná donde se encuentra la Virgen de Itacua.
El domingo, a las 7:00, la comitiva partió en dirección a Ciudad del Este para formar parte de la Toma de Posesión de Monseñor Guillermo Steckling quien fuera ordenado como nuevo obispo de Ciudad del Este.
M0ns. Guillermo Steckling asumió oficialmente luego de la imposición de mano de todos Obispos del Paraguay. Su lema episcopal es “Venga a nosotros tu reino”
Steckling nació en Verl, al norte de Alemania, el 23 de abril de 1947. Fue ordenado sacerdote el 20 de julio de 1974. Tiene 40 años de consagración.
En 1974 llegó como misionero al Paraguay desempeñándose como párroco en Puerto Elsa, hoy Nanawa, luego pasó como vicario en San Vicente de Paul, en Colonia Independencia. Fue también formador de seminaristas menores en Villa Morra, provincial de los misioneros Oblatos en Paraguay y norte de Argentina.
En Roma fue miembro del Consejo General de los Oblatos, posteriormente superior, entre otros cargos. Actualmente, es superior del Seminario Mayor OMI en Lambaré. Tiene una larga trayectoria en nuestro país. La diócesis que dirigirá Mons. Steckling abarca los departamentos de Alto Paraná y Canindeyú.
Steckling sucede en el cargo a Mons. Rogelio Livieres Plano, luego de que este fuera sustituido por orden del Papa Francisco quien nombró, inicialmente, a Mons. Ricardo Valenzuela como Administrador Apostólico.